Trastornos de alimentación: causas, tipos y tratamiento
Como servicios de psicólogo en Delicias que ofrecemos, sabemos que muchas personas sienten presión por una sociedad que exige mantener un peso ideal para encajar con los cánones de belleza establecidos. En nuestro país, aproximadamente casi el 10% de la población sufre un desorden de alimentación, especialmente en adolescentes y jóvenes mujeres.
Causas y factores de riesgo
Aunque los adolescentes y las mujeres jóvenes sean más propensos a tener anorexia o bulimia, los hombres también pueden sufrir este tipo de patología. Los factores y causas que aumentan la probabilidad de padecer estos trastornos son:
- Genética y biología: algunas personas tienen genes y antecedentes familiares con este tipo de trastornos. Por lo tanto, tiene una mayor predisposición a sufrir este tipo de enfermedad.
- Salud psicológica y emocional: las personas que sufren trastornos alimentarios pueden tener una autoestima baja, comportamientos impulsivos y relaciones defectuosas. O incluso también pueden tener otro tipo de trastornos mentales como el trastorno de ansiedad u obsesivo – compulsivo.
- Dieta y hambre: obsesionarse con adelgazar o tener hambre puede influir a desarrollar conductas alimentarias poco sanas.
- Estrés: el estrés aumenta el riesgo de tener un trastorno de la alimentación.
Tipos de trastornos de alimentación
Los trastornos alimentarios más frecuentes son:
Anorexia nerviosa
La anorexia nerviosa o también llamada anorexia se caracteriza por un gran miedo a aumentar de peso, por una percepción totalmente distorsionada de la figura corporal y un peso exageradamente bajo. Las personas con anorexia limitan en exceso las calorías entre otras estrategias y esfuerzos para bajar de peso. En los casos más graves puede incluso llevar al fallecimiento.
Bulimia nerviosa
Este tipo de trastorno de alimentación también es potencialmente mortal. Las personas con bulimia sufren una gran pérdida de control sobre su alimentación. Pasan de episodios de atracones a restringir su alimentación durante el día. Después de haber comido en exceso, provocan vómitos por vergüenza, culpa y miedo intenso a aumentar de peso.
Trastorno alimentario compulsivo
Este tipo de trastorno consiste en comer con ansiedad, rapidez, consumir de manera excesiva, o seguir comiendo aun saciando completamente el apetito y sentirse muy lleno. Tras el atracón, las personas sufren culpa y lo intentan compensar con ejercicios desmesurados y poco saludables y, en algunas ocasiones también pueden provocar vómitos como en el caso de la bulimia.
Trastorno de rumiación
Consiste en la regurgitación repetida tras comer sin que haya una intención. En ocasiones, las personas regurgitan los alimentos, los mastican, tragan o los escupen. Suele darse en niños pequeños o personas con diversidad funcional y puede derivar en desnutrición.
Trastorno de evitación o restricción
Este tipo de trastorno se da por la ausencia de interés en alimentarse evitando comidas con determinadas características (colores, aromas o texturas) o por preocupación de aumentar de peso o por atragantarse. Se caracteriza por no alcanzar la nutrición diaria mínima y su resultado puede generar problemas de salud
Todos los trastornos mencionados pueden causar complicaciones graves como problemas laborales, depresión y ansiedad, problemas de crecimiento, en las relaciones sociales o incluso adicción a otras sustancias peligrosas.
Un trastorno alimentario es difícil de controlar sin ayuda. Si notas signos de algún problema de alimentación que te impiden tomar el control y afecta a tu día a día, lo mejor es que busques ayuda psicológica para abordar este problema. En Dyadis Psicología, te ofrecemos apoyo y recursos eficaces para que te alimentes adecuadamente sin que suponga un riesgo en tu salud mental y física.